¿Qué es el Open Bank Project y cómo las APIs abiertas están cambiando a la banca?
En la actualidad una alternativa que forma parte de la innovación financiera es convertir a los bancos en grandes Plataformas como Servicios (Platform As a Service - PaaS), que no es más que la utilización de la nube para el almacenamiento y gestión de altos volúmenes de información sensible (Big Data) y la capacidad para compartir hardware y software con las unidades de negocio de terceras empresas que pagan por ello. Todo esto a través del uso de interfaces de desarrollo de aplicaciones (APIs) y es en este punto donde entra en juego el Open Bank Project.
¿Qué es el Open Bank Project y cómo funciona?
Open Bank Project “es una API de código abierto y también es una tienda de aplicaciones que permite a los bancos aprovechar el talento y el desarrollo de terceros para mejorar sus productos y servicios para clientes”. La API proporciona una interfaz técnica uniforme para todos los programadores y un espacio seguro para la creación de nuevos servicios de cada banco.
Simon Redfern es el fundador de Open Bank Project y director general de TESOBE, la compañía de software alemana que desarrolló el proyecto. Son especialistas en el desarrollo de interfaces de aplicaciones en lenguajes Scala y Python
Contrario a lo que se pudiera pensar, el uso de esta interfaz es seguro por dos razones:
- El proceso de registro de los usuarios siempre se produce por el lado del banco. Ni la API ni las aplicaciones tienen acceso al usuario y la contraseña.
- Al existir más desarrolladores usando la interfaz los errores se solucionan con mayor rapidez. Además, no existe dependencia de un proveedor.
Algunas ventajas de la API son:
- Gran gama de aplicaciones web y móviles para sus clientes.
- Reducción de los costes de mantenimiento e integración.
- Más control y seguridad sobre los datos.
- Aprovechamiento del talento y la comunidad de desarrolladores.
Es un ecosistema donde todos los participantes ganan: los clientes y usuarios, que reciben nuevos servicios y productos relacionados con sus cuentas; los desarrolladores, que se transforman en equipos innovadores y los bancos, que exploran nuevos ingresos.
Por otro lado el Open Bank Project aporta valor al concepto del Open Banking Standard (Estándar de Banca Abierta) que ya viene siendo tema de discusión desde hace unos años. En el año 2014 el Departamento del Tesoro británico (HM Treasury) publicó un informe en el que explica cómo las interfaces de desarrollo de aplicaciones pueden ser una buena herramienta para usar datos compartidos y abiertos sin perder seguridad ni privacidad. Para el año 2016 el British Open Banking Working Group (OBWG) hizo público el documento sobre el Estándar de Banca Abierta, donde se define el espacio de cohabitación entre los dueños de los datos y los que los usan para crear productos, servicios, aplicaciones.
Este estándar reafirma el uso de las APIs abiertas para los bancos con dos objetivos: tener ingreso libre a los datos abiertos y acceso compartidos a los datos privados. Esto no significa que los datos sean abiertos, sino que son respaldados por una tecnología y una interfaz de entrada uniforme y abierta. De hecho, los datos en el sector financiero necesitan autorización y en este escenario éstos estarían bajo la licencia Creative Commons CC-BY; quien sea beneficiario de esta licencia tiene derecho a copiar, distribuir, exhibir y representar siempre que cite al autor.
Finalmente lo que pide el documento de British Open Banking Working Group es que clientes y desarrolladores puedan obtener la información con facilidad y que los bancos puedan alcanzar a un mayor número de usuarios potenciales con esta apertura.
Ejemplos de Open Bank Project
Ya existen algunas aplicaciones de servicios gracias a Open Bank Project. Acá algunos ejemplos:
- Kashflow: es un software de facturación, fácil de usar, sin que sea necesario tener excesivos conocimientos de contabilidad previos.
- Pocket Money Sorted: una aplicación disponible para iOS y Android cuya finalidad es cambiar la forma en la que las familias gastan sus ingresos.
Con el desarrollo de estas APIs se busca un objetivo de gran valor, y es la transparencia y la lucha contra la corrupción y la mala praxis bancaria y financiera. No se trata solo de obtener fuentes de ingreso adicionales, sino de crear un modelo sostenible, abierto y cuidadoso para el cliente.
También te recomendamos leer:
Etiquetas Populares :
Joseph J. Solis
Otros artículos de interés:
3 estrategias de Cloud Banking para competir y crecer inteligentemente
¿Qué necesita la banca tradicional para transformarse en una plataforma bancaria?
La pandemia ha impulsado la banca abierta
Suscríbete al blog de Cobis.
Recibe las últimas noticias sobre innovación financiera.
Los más leídos
La importancia de estar bancarizado
Categorías
- 2020
- Agile
- agilidad financiera
- analitica
- Artificial Intelligence
- Atención al Cliente
- automation
- automatización bancaria
- AWS
- banca
- banca digital
- banca inteligente
- Banca Internet
- banca movil
- Banca Móvil
- banca verde
- bancarizacion
- banking customer
- big data
- Bitcoin
- Blockchain
- Canales Bancarios
- ciberseguridad
- Clab
- cloud
- Cloud Banking
- colombia
- comercio electrónico
- Cooperativas y SOFIPOS
- Core Bancario
- covid-19
- credit services
- criptomonedas
- crédito
- Cultura COBIS
- data
- Data Management
- DevOps
- Digital Bank
- Digital Banking
- Digital Finance
- Dinero electrónico
- disrupción bancaria
- ecommerce
- Eventos
- experiencia bancaria
- financial technology
- Financial Trends
- Fintechs
- inclusion financiera
- Inclusión Financiera
- Innovación
- Innovación Bancaria
- Innovación Financiera
- inteligencia artificial banca
- Internet Banking
- Movil
- mujeres
- neobancos
- nube
- nube híbrida
- Open Banking
- P2P
- Pagos
- pagos online
- Paperless
- Prestamos
- prestamos digitales
- Project Pulso
- protección de datos
- préstamo
- regtech
- regulación bancaria
- Seguridad
- Seguridad Bancaria
- Serverless
- servicio al cliente
- Servicios
- soluciones en la nube
- Tecnología Bancaria
- usuarios
- womenintech
- ver más
Autores
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Catalina Arango Bedoya
- Cobis Topaz
- Flávio Gaspar
- Catalina Arango Bedoya
- Cobis Topaz
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Cobis Topaz
- Catalina Arango Bedoya
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Pablo Villacís
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Cobiscorp
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo