La Banca es uno de los sectores más regulados, especialmente durante este periodo de aparición de nuevos comportamientos generacionales y de fintechs. A partir de estas nuevas dinámicas, han surgido marcos legales y parámetros de cumplimiento regulatorio que no existían antes. Es aquí donde los bancos han recurrido a RegTech. RegTech es la mezcla entre regulations y technology que combinan el poder de la tecnología con las necesidades regulatorias emergentes para agilizar las estrategias de innovación de las instituciones financieras. El nacimiento, cambio y evolución de las RegTech fue uno de los temas que se discutió en CL@B 2017 en Miami, US.
Las RegTech representan aquellas soluciones tecnológicas diseñadas precisamente para asistir el cumplimiento regulatorio de los bancos. Entre ellas tenemos el uso de inteligencia artificial para evaluar riesgos, el uso de tecnologías de Data Warehousing para prevenir ataques cibernéticos o brechas de seguridad y el uso de flujos automáticos que presenten reportería inmediata requerida por los entes de control.
La disrupción digital que enfrenta la industria financiera ha creado un auge de nuevas alianzas entre empresas fintech e instituciones bancarias, donde son las segundas son las que tienen que lidiar con la mayor cantidad de regulaciones por entidades de control. Además de ser las responsables por las tecnologías que implementan.
Para este escenario, la transparencia entre los dos entes es imperativa. Durante la sesión la recomendación principal fue que, si los bancos deciden empezar estrategias con proveedores fintech, deben tener un buen proceso de inducción implementado donde ambos lados entiendan las regulaciones a las que son sujetos.
Dentro de esta relación, se debe trabajar en generar confianza entre los socios ya que muchos de los procesos de calificación del proveedor fintech de soluciones tecnológicas, involucrará el escrutinio a detalle de las personas que forman parte de la junta directiva de la institución. El banco, como último responsable de cumplimiento regulatorio, debe investigar la experiencia del proveedor, la experiencia de las personas detrás de la empresa y educar sobre las leyes y parámetros existentes en su región.
Debido a la aparición rápida de soluciones financieras, evidenciada en los últimos años, los entes reguladores de diferentes países han tenido que enfrentar un dilema: evolucionar o pelear.
La respuesta ha sido distinta dependiendo del país en el que nos encontremos; algunos países han tomado el lado de los bancos quienes exigen que se someta a las fintech al mismo rigor legal que las instituciones financieras grandes han tenido que enfrentar, mientras que otros afirman que las leyes aplicadas a las fintech deben tener mayor flexibilidad que fomente la innovación.
Reino Unido, por ejemplo, es uno de los escenarios en los que el debate ha tomado un polo más dirigido hacia la innovación que favorezca a las fintech. Se trata del “Financial Services Innovation Act” propuesto por Patrick McHenry, el cual, de ser aprobado, permitiría que las nuevas soluciones financieras propuestas por las fintech gocen de un período regulatorio de prueba beta con parámetros más flexibles que otras instituciones financieras.
Algo que ha traído consigo la revolución fintech es el mayor acceso a servicios financieros para los usuarios. Un estudio de PwC, señaló que en el 2015, la inversión fue de cerca de 12.200 millones de dólares, más del doble de los 5.000 millones registrados en el 2014, lo que refleja el crecimiento de esta industria. Esto ha provocado que las instituciones financieras ahora cuenten con un volumen masivo de datos recopilados de sus usuarios, los cuales deben ser procesados y evaluados para asegurarse que cumplan con los requerimientos regulatorios de los entes de control. Es aquí donde RegTech aparece nuevamente como una solución de disminución de riesgos. Por ejemplo, parámetros de inteligencia artificial (AI por sus siglas en inglés) están siendo usados para detectar aplicaciones y perfiles que presenten riesgo o descripciones irregulares; facilitando la gestión y cumplimiento de instituciones financieras.
En este ámbito, el tema principal del CL@B fue la importancia de encontrar aliados estratégicos que conozcan el ambiente regulatorio a los que están expuestos las grandes instituciones financieras antes de proceder con una nueva empresa fintech. Este es un desafío para muchas fintech ya que, la mayoría, no ha tenido experiencia trabajando dentro del ecosistema financiero y carecen del acervo regulatorio necesario.
A pesar de las limitaciones, este no debe ser necesariamente un obstáculo para la innovación. En la conferencia se enfatizó que esto puede ser una de las variables que ayuden precisamente a distinguir frente a un proveedor óptimo y otro que no lo es. Muchas fintech, por ejemplo, tienen su propio departamento de compliance dedicado a mantenerse actualizado en regulaciones a las que pueden ser sujetos.
Otra opción es desarrollar nuevos productos tecnológicos con proveedores de software que tienen experiencia trabajando con tecnología financiera para instituciones bancarias.
Este punto es una combinación entre los otros dos antes mencionados. Dado el nuevo volumen de datos que recibe un banco y la aparición de diferentes regulaciones a los que son sujetos, los departamentos de compliance de entidades financieras enfrentan el reto de actualizar constantemente las soluciones tecnológicas que utilizan para el cumplimiento regulatorio.
Es por esta razón que los bancos deben buscar que sus proveedores de RegTech ofrezcan flexibilidad; la capacidad de rediseñar e iterar los sistemas para las necesidades específicas que cada banco requiera.
Un desafío constante que enfrentan los bancos que quieren asociarse con fintech es el temor al riesgo existente de que las nuevas tecnologías presenten brechas de seguridad para ataques cibernéticos.
Una de las sugerencias para las fintech involucradas en RegTech es ver el tema de cybersecurity del mismo modo que lo ven los bancos, incluyendo en su vocabulario y en sus procesos terminologías como gestión de riesgo, cyber risk assessment tools y departamentos de compliance.
De igual forma, un banco debe evaluar qué tan familiarizado está una compañía de RegTech con estos procesos en su decisión de alianza estratégica.
Las nuevas soluciones en tecnología financiera solo continuarán en aumento y con ellas las regulaciones necesarias por entidades de control. Por esta razón, los bancos y las entidades de control deben permitir que la tecnología disponible (RegTech) se vuelva una ventaja para ambas partes que se acople a los nuevos escenarios digitales.
Como puntos destacados que deben considerar los bancos tenemos:
COBIS es una empresa de desarrollo de soluciones financieras que cuenta con experiencia tanto en el mundo regulatorio del sector bancario, como en el desarrollo de tecnologías flexibles que se adapten a los requerimientos de cada institución. La solución COBIS REC* ha ayudado a diferentes instituciones financieras a automatizar y pulir su recolección de datos y reportería de cumplimiento a entes de control, reduciendo costos operativos y riesgos de sanciones.
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