El reto de los bancos es crecer de forma sostenible, adaptándose a las nuevas tecnologías. Este desafío, aunque parezca concreto, tiene muchas variables; el mundo de hoy gira en torno a herramientas tecnológicas de economía colaborativa, procesamiento de datos, experiencia de usuario y otros componentes que hacen que casi cualquiera pueda actuar como una entidad financiera. Precisamente este fue el tema que predominó en CL@B 2017 en Miami (EE.UU.), uno de los eventos financieros más importantes de la región.
Cuando se popularizó el bíper, en la década de los 90, se transformó la relación de los bancos con sus usuarios. A través de este dispositivo, las personas recibían inmediatamente información de sus estados de cuenta o transferencias. Lamentablemente, ningún banco previó la ola de cambios que se vendrían en los años posteriores; los clientes empezaron a cuestionar su eficiencia y capacidad de entendimiento frente a sus necesidades.
Apareció el internet, los correos electrónicos, las redes sociales, las apps y los smartphones. No obstante, mientras eso ocurría, algunos bancos seguían operando con sistemas primitivos como el fax, para recibir comunicaciones de sucursales de otros países. El reto era evidente: internet llegó para romper la burocracia bancaria y de esta manera nacieron las fintech (contracción entre finance y technology), las cuales se enfocan en atender las necesidades de los usuarios en el sector financiero, con el aprovechamiento de las nuevas tecnologías.
Estas nuevas tecnologías no solo corren, vuelan. Hace dos años los bancos abrían cuentas a través de redes sociales, hoy se utiliza el machine learning; inteligencia artificial que atiende pedidos de clientes, en tiempo real, sin necesitar una persona detrás del proceso.
¿Cuál es el aporte de las fintech?
Con las fintech se dinamizó el terreno para que la tecnología sea aliada de los servicios financieros. Al inicio eran percibidas como una amenaza para los bancos, sin embargo, con el tiempo se volvieron aliadas estratégicas. Existen muchos casos de éxito de bancos que han trabajado con fintech para mejorar un producto o servicio.
Se puede decir que las fintech son las responsables de:
Una de las charlas con más impacto en CL@B 2017 fue “Fintech ¿verdad o fantasía?” en la que expositores de la talla de Bipin Sahni, Head of Innovation de Wells Fargo; Gustavo Fosse, Director de TI del Banco do Brasil y Joao Fernandes, Regional Sales Director de BackBase, bajo la moderación de Jorge Ruiz, CEO y Fundador de Above & Beyond, hablaron de los retos de la banca para dinamizarse al ritmo de las fintech.
No se puede ignorar que la cuarta revolución trajo consigo la convergencia del mundo físico y cibernético. Las tecnologías digitales han cambiado el modelo de negocio tradicional, han reemplazado el paradigma actual. Definitivamente las fintech son una realidad que está frente a nosotros y no deben ser percibidas como una moda pasajera.
Los bancos deben sobrevivir a las fintech, no luchando contra ellas sino innovando a su ritmo, mejor aún, con su ayuda. En este panel de conversación se dijo que los bancos invierten muy poco en ellas y eso es lo que les está frenando el crecimiento.
En primer lugar los bancos deben aliarse con una fintech para mejorar un segmento de su servicio. La recomendación es hacerlo con una sola y no varias, con el fin de enfocarse en sacar un producto o servicio viable que mejore la experiencia del cliente. En ese contexto, COBIS es una empresa con experiencia en implementar cambios de profundidad en las organizaciones para innovar. Además, cuenta con más de 500 expertos en la región, alianzas estratégicas con startups y fintechs y más de 60 años de experiencia en asesoría financiera para que la banca.