Desde que se decretó el aislamiento obligatorio en la mayoría de los países, las transacciones financieras por canales digitales crecieron solo en América Latina, casi un 50%, lo que aumenta a su vez el riesgo de fraudes en estas operaciones y pone en el centro del debate el tema de la ciberseguridad. A continuación, te contamos cuales son los principales riesgos y cómo prevenirlos.
Riesgos de ciberseguridad más comunes
Correos maliciosos o “phishing” que piden los datos bancarios de los usuarios, páginas web sospechosas que buscan obtener información privada y “ransomware” o virus que se instalan en las computadoras y teléfonos móviles para el robo de datos son los riesgos más comunes a los que se enfrentan los usuarios a la hora de hacer pagos por internet.
Además, nuevas formas de fraude y robo de información han surgido aprovechando la coyuntura del COVID-19, como páginas falsas sobre las cifras de enfermos del coronavirus que, al ser abiertas por los usuarios, se descargan e instalan en los dispositivos un “malware” o virus para el robo de información.
Esta época es de especial atención en temas de ciberseguridad, porque a medida que las personas usan en mayor medida los canales digitales, estos se vuelven más apetecidos por los cibercriminales para realizar estafas y robos de información y dinero.
Medidas de protección para los usuarios
Dentro de este nuevo panorama de aceleración digital, aumenta también en los usuarios la preocupación por la seguridad de los pagos y transacciones y la protección de estas operaciones se vuelve un factor fundamental a la hora de escoger y calificar un servicio de banca digital. Según la consultora en tecnología y finanzas KPMG en su informe “Cómo evolucionan los bancos en 2030”:
“Los bancos que se centran en proporcionar seguridad, protección y ciberseguridad de los datos tienen muchas más probabilidades de ser considerados por los clientes como la entidad con los niveles más altos de calidad.”
Por esto, los bancos deben tener la seguridad de su banca digital como una prioridad dentro de su estrategia de crecimiento y adoptar medidas que sean un aval de robustez de sus canales digitales.
Además de campañas de educación con los usuarios sobre riesgos digitales, es fundamental que las aplicaciones de banca digital cuenten con los últimos desarrollos tecnológicos de ciberseguridad que sólo un socio tecnológico de alto nivel puede proporcionar.
COBIS cuenta con un reforzamiento de seguridad de todas sus soluciones tecnológicas gracias a su alianza con la empresa de ciberseguirdad ESET que pertenece a la “App Defense Alliance”, que detecta todas las aplicaciones sospechosas en un entorno de Google Play Store asegurando la confianza de las aplicaciones de banca digital. Si quieres conocer más sobre esta alianza te invitamos a escuchar el webinar: “Teletrabajo seguro en emergencia del COVID-19”.
Acciones como estas y todas las medidas que se puedan tomar para reforzar la seguridad de los canales de banca digital y de sus usuarios garantizará un posicionamiento positivo de un banco en esta coyuntura, convirtiendo así el reto que ha impuesto el COVID-19 en una oportunidad para optimizar los canales digitales y la reputación de una institución de servicios financieros. COBIS como experto en soluciones tecnológicas para la banca quiere ayudarte en este proceso. Conoce más de nuestros productos y servicios en www.cobiscorp.com
Otros artículos de interés:
La mayoría de organizaciones públicas y privadas de la región consideran estar preparadas para responder a ataques cibernéticos. Sin embargo, se necesita seguir invirtiendo en seguridad digital para estar a la altura de los desafíos del siglo XXI.
La inteligencia artificial está cada vez más inmersa en el mundo en el que vivimos, la banca no es ajena a esta tendencia. La industria financiera necesita implementar este tipo de tecnología para seguir siendo competitiva. La aplicación de IA en apps y servicios bancarios permite aumentar los ingresos mediante una mayor personalización de su portafolio para los clientes, reducir los costos a través de la automatización, margen de error limitado y una mejor utilización de los recursos.
Según un informe de la firma de ciberseguridad Kaspersky sobre la frecuencia de ciberataques en América Latina, entre noviembre de 2018 y noviembre de 2019 se registraron 97 millones de ataques de phishing o correo fraudulento en la región: lo que equivale a 42 ataques por segundo. Estas cifras evidencian la necesidad de invertir en ciberseguridad para garantizar una mejor protección a las operaciones digitales en 2020.
La transformación que vive actualmente el sector financiero está generandoun cambio significativoa nivel mundial. La frecuencia de uso de aplicaciones de pagos digitales ha generado una población bancarizada en Latinoamérica que comienza a diversificarse.
Otros artículos de interés:
Contáctanos
