Cloud Banking: De qué se trata la banca en la nube y cómo implementarla
Mucho se habla de Cloud Banking, como el sistema que va a dominar en el sector financiero. Se trata de la data de los bancos en la nube; números, cuentas, transacciones, giros, gestión de documentos... toda la relación entre bancos y clientes está en la nube.
Una de las primeras instituciones financieras que hizo esta apuesta fue el Banco Santander. Esta compañía relató al Financial Times cómo se convertiría en un banco que contaba con almacenamiento de datos en la nube para ofrecer a sus clientes acceso a las nuevas tecnologías.
De hecho, según declaraciones de directivos de este banco la idea de lanzar este servicio surgió por la inquietud de ¿cómo competir con nuevos jugadores tecnológicos, como las startups financieras? La respuesta a esa pregunta fue: estando al día en las tendencias tecnológicas, para lo que destinaron un presupuesto de unos USD 3.000 millones para desarrollar soluciones, según la nota del Financial Times.
Los retos de la industria financiera
Estar al día en nuevas tendencias y entender el mercado es clave para no quedarse atrás en el mundo tecnológico. Hace poco se publicó un estudio que decía que la disrupción digital sacará del mercado a 4 de cada 10 empresas. Para sacar esta conclusión se entrevistaron a 941 líderes empresariales de 12 industrias a escala mundial. Los resultados dejan un camino de innovación que deben seguir las empresas para no desaparecer. Uno de los resultados más impactantes es que la disrupción digital sacará del mercado a la mitad de las empresas en los próximos cinco años.
Menos mal existen bancos que están pensando en la disrupción digital e invirtien para no quedarse atrás en la carrera contra las startups. De hecho, el BBVA es otro banco que le apuesta a la banca en la nube, como explicaba el diario El Mundo de España. "El modelo de hacer banca ha cambiado radicalmente en solo unos años. Los clientes de BBVA que utilizan dispositivos móviles (smartphones, tablets y ordenadores) para realizar sus operaciones habituales se han multiplicado por 14 en los últimos tres años y sumaban ya 4,3 millones a finales del 2015, decía ese medio.
Ese crecimiento solo quiere decir que cada vez los bancos deben estar atentos a estos cambios y cambiar su modelo de negocio. Es decir, apalancarse en redes sociales, entender el big data como un aliado estratégico para tomar mejores decisiones y ver en las startups una oportunidad de reinventarse, como se habló en la conferencia #BancosyStartups. Y es que los bancos son percibidos como elefantes grandes y lentos que no reaccionan a tiempo a la ola de innovación. Por ese motivo es clave que todo el conocimiento de un banco se complemente con la agilidad de un startup para desarrollar soluciones innovadoras.
Uno de los directivos del BBVA dijo en una conferencia que es clave regular el mundo digital para evitar que se convierta en "el salvaje Oeste" y ha reconocido que, en banca, "el dinero son datos": "Los datos se pueden transformar en información, la información en conocimiento, y el conocimiento en nuevos productos".
Siguiendo con el cloud banking, o banca en la nube, la clave es innovar, pero también entender la regulaciones de cada país. Por ejemplo, algunos lugares permiten que las entidades financieras tengan la información en la nube, pero debe estar respaldada físicamente en data center. Es decir, es un centro de datos en el que está toda la información de una empresa. Aunque la información está en la nube existe un respaldo físico.
Otro tema importante sobre la nube es hablar de los diferentes actores en los pagos. Y no solo se ve en el sector financiero, sino en la música o a la hora de ordenar comida, dejó de ser una relación de dos, ya que se incluyen proveedores especializados. Los servicios están alojados de forma remota y el pago a través del banco requiere una absoluta integración con nuevas tecnologías para que haya la seguridad necesaria en la transacción.
Sobre este tema aún queda mucho por discutir, porque se está viviendo la era de innovación. La clave es que los bancos estén atentos a estos cambios y tengan presupuesto para innovar. Eso sí, debe hacerse con un socio estratégico que les ayude a tomar mejores decisiones para invertir de manera inteligente los recursos.
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