¿Por qué la atención a pymes debería ser el nuevo enfoque para la banca?
Las pequeñas y medianas empresas (pymes) son catalizadoras del desarrollo económico de un país. A través de la creación de productos innovadores, potencian el comercio y las exportaciones, y generan miles de empleos que mejoran la calidad de vida de las personas.
Según cifras del Banco Mundial mientras que el 40% de las pymes en Europa exportan sus productos y servicios, solo el 10% de las pymes en América Latina lo hace. Esto se debe, en gran medida, a las dificultades que enfrentan estas empresas para acceder a financiamiento, lo que ralentiza o imposibilita su crecimiento.
“Las entidades financieras no facilitan lo suficiente el acceso a créditos que las pymes precisan para afrontar la expansión de sus negocios. Por otra parte, en general, la creación de empresas es un proceso lento que requiere numerosos, complejos y costosos trámites que retrasan emprender un negocio”, señala el Banco Mundial.
El sector financiero tiene un importante rol en la promoción y crecimiento de las iniciativas de los emprendedores latinoamericanos. Al facilitar el acceso a mecanismos de financiamiento, la banca puede fomentar la diversificación al interior de estas empresas y acelerar el proceso de expansión de las mismas, mejorando la calidad de vida de miles de personas en la región.
Al ofrecer a las pymes un servicio adaptado a sus necesidades, la banca tiene el poder para contribuir con el desarrollo de la región. La clave es contar con una solución de tecnología bancaria que facilite esta tarea.
¿Cómo elegir una solución de tecnología enfocada en las pymes?
Para la consultora Ernst & Young LLP (EY), existen una serie de preguntas que la banca debe hacerse para entender mejor cómo puede ayudar a las pymes al proporcionar información, herramientas y servicios que sirvan mejor tanto a las empresas como a sus clientes finales.
Las entidades financieras que mejor respondan a estas preguntas estarán en mayor capacidad de atraer y retener clientes del segmento pymes.
7 preguntas que deben hacerse los bancos
- ¿Cómo mantener las relaciones existentes con los clientes pyme cuando terceros se conviertan en una parte clave de la cadena de valor?
- ¿Cómo garantizar que los productos financieros de las pymes sigan siendo rentables?
- ¿Se puede aprovechar el modelo de ecosistema digital para crear nuevas fuentes de ingresos?
- ¿Está el banco en capacidad de cumplir con las regulaciones asociadas con la aparición de nuevos participantes a la cadena de valor?
- ¿Cómo debería el banco actualizar sus sistemas para satisfacer las demandas de un modelo basado en un ecosistema digital?
- ¿Qué procesos pueden automatizarse para ofrecer operaciones simplificadas y sin fricciones, de modo que se pueda entregar en tiempo real un servicio óptimo a las pymes?
- ¿Cómo se pueden actualizar los enfoques de desarrollo? (DevOps, Agile, etc.)
El sector financiero: socio en el crecimiento de las pymes
La prevalencia de la tecnología API en el ecosistema juega un papel en la transformación y digitalización de las relaciones con las pymes, cambiando la forma en la que los productos y servicios financieros están disponibles.
Al migrar a un modelo de plataforma la banca puede convertirse en un socio estratégico de los emprendedores, creando una nueva oferta de valor basadas en productos y servicios bancarios novedosos que satisfagan las necesidades del segmento pyme.
A través de COBIS Mainstreet, COBIS ayuda a las instituciones financieras a potenciar el crecimiento de las pequeñas y medianas empresas y, por tanto, favorecer el desarrollo económico de la región. Si quieres conocer más sobre esta solución y convertirte en un aliado de las pymes, contáctanos.
También puedes leeR:
La mayoría de organizaciones públicas y privadas de la región consideran estar preparadas para responder a ataques cibernéticos. Sin embargo, se necesita seguir invirtiendo en seguridad digital para estar a la altura de los desafíos del siglo XXI.
La inteligencia artificial está cada vez más inmersa en el mundo en el que vivimos, la banca no es ajena a esta tendencia. La industria financiera necesita implementar este tipo de tecnología para seguir siendo competitiva. La aplicación de IA en apps y servicios bancarios permite aumentar los ingresos mediante una mayor personalización de su portafolio para los clientes, reducir los costos a través de la automatización, margen de error limitado y una mejor utilización de los recursos.
Según un informe de la firma de ciberseguridad Kaspersky sobre la frecuencia de ciberataques en América Latina, entre noviembre de 2018 y noviembre de 2019 se registraron 97 millones de ataques de phishing o correo fraudulento en la región: lo que equivale a 42 ataques por segundo. Estas cifras evidencian la necesidad de invertir en ciberseguridad para garantizar una mejor protección a las operaciones digitales en 2020.
La transformación que vive actualmente el sector financiero está generandoun cambio significativoa nivel mundial. La frecuencia de uso de aplicaciones de pagos digitales ha generado una población bancarizada en Latinoamérica que comienza a diversificarse.