El diario Expansión iniciaba el año con un artículo que afirmaba que “la necesidad de renovarse y el recorte de costes” presionaba a los bancos a centrar su inversión en 2018 en “tecnologías emergentes” y sistemas como “Identificación Digital, Inteligencia Artificial y Blockchain”. Sin embargo, dejaba de un lado un factor clave para la transformación digital de las entidades bancarias: el capital humano en el departamento de IT.
Retos informáticos de la nueva era de la banca
Todo el sistema de banca electrónica y gestiones online se basa en la confianza de los clientes. Cuando no hay un contacto directo, se exige un sistema seguro y transparente. Problemas con las tecnologías y servicios, como el simple hecho de no poder efectuar una transferencia básica, hacen que la confianza caiga en picada y el cliente se decante por la competencia.
Además de los fallos del sistema, los riesgos de ciberseguridad son una de las inquietudes de los clientes y por supuesto la principal preocupación de las entidades. Con la digitalización de la banca, la única opción es construir equipos tecnológicos, en algunos casos incluso empresas, que centren sus recursos en el estudio de este ámbito. CaixaBank, por ejemplo, asegura que su equipo de seguridad informática es pionero en la coordinación e investigación de este campo (CiberSOC) gracias a la inversión realizada.
Capital humano de IT, una necesidad para las instituciones bancarias
Reunir y formar un equipo de profesionales que aporten conocimiento e ideas en el área de IT es esencial y los grandes bancos lo saben. Las ofertas de empleo en el sector bancario para ingenieros, sobre todo informáticos y de telecomunicación, físicos y matemáticos se han disparado y la formación especializada en Fintech, Blockchain, o Big Data para estos profesionales está en aumento.
El banco BBVA presentó recientemente un máster en STEM (estudios de Science, Technology, Engineering and Mathematics, o en español: Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas), que servirá para que estos profesionales apliquen sus conocimientos a las entidades financieras. El Master ya comenzó a principios de septiembre de 2018 en la Universidad Carlos III de Madrid.
Los perfiles STEM están capacitados para desarrollar e implementar innovaciones tecnológicas como lo son la robótica, la Inteligencia Artificial y el Big Data. Aunque no existe gran proporción de personas capacitadas en este ámbito, en el área de economía y finanzas y banca en donde más se requieren este tipo de perfiles para: desarrollo de aplicaciones móviles, programación y big data.
En el blog del banco, el responsable de Gestión del Talento en la división de CIB de BBVA, Jordi Combis, afirmó que “los perfiles STEM tienen una opción laboral cada vez más clara en el sector financiero”. Por su parte, el Data Portfolio Manager, José Cebrián, aseguró que es muy importante la formación interna, además de incorporar talento externo. La entidad tiene más de 12.000 desarrolladores en la actualidad y no es el único banco que buscar captar el talento de jóvenes profesionales. El banco Santander también presentó su programa de ayudas económicas a estudiantes que quieran hacer un posgrado o máster en materias STEM. En su caso, está destinado a mujeres y busca impulsar su presencia futura en el sector financiero, además de ofrecer prácticas formativas en una de las entidades del banco durante 12 meses.
El capital humano, su captación y formación, además de la creación de un ambiente abierto y comunicativo bajo la necesaria implementación de la metodología agile, es la mejor manera para adaptarse a los cambios que están generando las nuevas formas de consumo de los clientes. Es evidente que los bancos deben invertir en su transformación digital y también en aquellos que puedan llevarla a cabo.
También te recomendamos leer:
Estratega de marketing digital para marcas B2B y non-profit. Graduado en la Universidad de Nueva Orleans, Joseph se especializa en la creación estrategias inbound en el mundo digital y el análisis de comportamiento web para el crecimiento de las marcas.
La mayoría de organizaciones públicas y privadas de la región consideran estar preparadas para responder a ataques cibernéticos. Sin embargo, se necesita seguir invirtiendo en seguridad digital para estar a la altura de los desafíos del siglo XXI.
La inteligencia artificial está cada vez más inmersa en el mundo en el que vivimos, la banca no es ajena a esta tendencia. La industria financiera necesita implementar este tipo de tecnología para seguir siendo competitiva. La aplicación de IA en apps y servicios bancarios permite aumentar los ingresos mediante una mayor personalización de su portafolio para los clientes, reducir los costos a través de la automatización, margen de error limitado y una mejor utilización de los recursos.
Según un informe de la firma de ciberseguridad Kaspersky sobre la frecuencia de ciberataques en América Latina, entre noviembre de 2018 y noviembre de 2019 se registraron 97 millones de ataques de phishing o correo fraudulento en la región: lo que equivale a 42 ataques por segundo. Estas cifras evidencian la necesidad de invertir en ciberseguridad para garantizar una mejor protección a las operaciones digitales en 2020.
La transformación que vive actualmente el sector financiero está generandoun cambio significativoa nivel mundial. La frecuencia de uso de aplicaciones de pagos digitales ha generado una población bancarizada en Latinoamérica que comienza a diversificarse.
Otros artículos de interés:
Contáctanos
